La nación

Estados Unidos eleva a más de 100 los militares que sufrieron lesiones cerebrales tras el ataque iraní en Irak

soldado estadounidense en Irak
Un soldado estadounidense camina delante de un dron en la base áerea de Ain Al Asad, en Irak, el pasado 13 de enero. AYMAN HENNA. AFP.

El nuevo número de afectados, adelantado por Reuters, supone un incremento de casi el 50% desde la última cifra reportada

10 de febrero de 2020 – Washington – Agencias.

El Ejército de Estados Unidos tiene previsto informar este lunes que más de 100 militares han sido diagnosticados con lesiones cerebrales a raíz del ataque lanzado por Irán el pasado 8 de enero contra dos bases aéreas ubicadas en Irak, donde había tropas estadounidenses desplegadas, según han contado fuentes militares a la agencia Reuters bajo condición de anonimato. El nuevo número de afectados supone un incremento de casi el 50% desde el último reporte dado a conocer el mes pasado, cuando se supo que 64 soldados padecían “conmociones cerebrales y TBI (lesión cerabral traumática)”, según la descripción del Pentágono.

Tres semanas atrás, cuando el presidente estadounidense Donald Trump se encontraba en el Foro Económico Mundial de Davos, se prununció sobre las lesiones cerebrales: “Escuché que tenían dolores de cabeza y un par de cosas más”, sostuvo. “Pero diría, y puedo informar, que no es muy grave”, agregó el mandatario. Varios oficiales del Pentágono han explicado que no ha habido ninguna intención de minimizar o retrasar la información con las nuevas cifras de heridos.

El Departamento de Defensa no ha hecho comentarios sobre el quinto incremento en las cifras de los afectados, pero el pasado 30 de enero advirtió que los números iban a crecer. El general Mark Milley, jefe del estado Mayor Conjunto, explicó entonces que el aumento respondía a que en algunas ocasiones los síntomas tardan en aparecer o los propios militares esperan un tiempo para dar parte de ellos. Los síntomas de este tipo de lesiones incluyen dolores de cabeza, mareos, sensibilidad a la luz y náuseas. De los 64 soldados afectados, 39 han vuelto al servicio, informaron las autoridades cuando detallaron el último reporte.

A mediados del pasado enero, el Ejército estadounidense admitió que había 11 heridos por los ataques iraníes. Una semana después elevó la cifra por encima de la treintena. El portavoz del Pentágono, Jonathan Hoffman, señaló en rueda de prensa que se trataba de “conmociones cerebrales y TBI (lesión cerebral traumática)”, pero no dio más detalles. Los ataques iraníes afectaron a las bases de Ain Al Asad, en el oeste del país, y de Erbil, en el Kurdistán iraquí. Llegaron como represalia a la muerte del general Qasem Soleimani, comandante de la fuerza de élite Al Quds de la Guardia Revolucionaria iraní, unidad a cargo de las operaciones en el exterior. La respuesta iraní no provocó el fallecimiento de ningún militar estadounidense.

Washington mató al poderoso general en un ataque con drones en el aeropuerto de Bagdad en la madrugada del pasado 3 de enero. Irán amenazó con que su ataque sobre las bases donde había tropas estadounidenses no era una respuesta proporcional a la muerte del general, pero no ha vuelto a efectuar ningún ataque contra bases con presencia estadounidense. Trump advirtió de que tiene 52 localizaciones iraníes como “objetivos” y atacará “muy rápido y muy fuerte” si Teherán golpea a ciudadanos o intereses estadounidenses. El 10 de enero Estados Unidos impuso sanciones adicionales a Irán por orden ejecutiva del presidente, impactado a los sectores claves de la economía iraní, como el industrial, el minero y el textil, así como a una serie de altos cargos del régimen.

Lo más leído

To Top
Translate »