9 de noviembre de 2020 – Washington – EFE.
El presidente, Donald Trump, sigue sin reconocer su derrota electoral, aferrado a sus denuncias de fraude no demostradas y dividiendo a los republicanos y a su círculo íntimo entre quienes le piden ceder a la evidencia y quienes le animan a seguir con sus reclamos.
Desde que se confirmó este sábado que Biden alcanzó los votos del Colegio Electoral suficientes para ser investido presidente en enero, noticia que le sorprendió jugando al golf, Trump ha estado enclaustrado con su círculo íntimo, estudiando sus planes para revertir el resultado de la elección y sin agenda pública.