13 de enero de 2021 – por: El Editor.
El 2021 que todos esperamos sea mejor que el 2020, no parece que en sus inicios esté de acuerdo con nuestros nobles deseo. El alza en los contagios y fallecimientos por el COVID-19, nos muestran que en cuanto a esta pandemia no va ha ser mejor que el que acaba de pasar; aunque en alguna forma, se esperaba que este repunte viniese, debido a las festividades de fin de año y a la falta de credulidad de muchos, todavía confiamos que luego de estos primeros días, inicie su descenso en el número de infectados y decesos. La controvertida vacuna y todo lo que alrededor de esta esperanza la rodea pudiera ser la tierra prometida, pero para ello todavía nos queda mucho trecho por andar.
Pero voy a comentarles de otra escenario insólito que ya se ha convertido en todo un hito en el comienzo de este 2021 que apanas está dando sus primeros pasos y este es: El asalto al Capitolio, que todos vimos por los medios, y que, no solo nos dejó perplejos e incrédulos por las imágenes mostradas, sino que después de lo pasado con mente más calmada y sosegada, hemos iniciado su análisis para poder entender lo acontecido y lo que hubo o hay, detrás de este extraño hecho.
Muchos de los interrogantes, sobre los autores, lo que buscaban y como entraron sin casi oposición alguna al emblemático edificio, empiezan ahora a develarse y nos muestran un panorama que nos lleva a una realidad que aunque veíamos en algunas manifestaciones esporádicas, no conocíamos la magnitud de ellas, ni su filosofía, pensamientos y doctrinas que asustan, en este país donde vivimos hay, sin duda alguna, otra gran multitud de personas, pudiéramos decir “otra pequeña nación” que piensan, opinan y actúan bajo otros principios, enmarcados en nacionalismos extremos, teorias conspirativas y que este asalto al Capitolio, puso al descubierto y que atraves de este editorial les muestro muy someramente:
¿Recuerdan al descamisado con cuernos de Búfalo?, Jake Angeli, “Q” es uno de los seguidores de extrema derecha QAnon. La teoría de la conspiración de QAnon se centra en la creencia infundada de que Trump está librando una campaña secreta contra los enemigos del “estado profundo” y una red de tráfico sexual infantil dirigida por pedófilos y caníbales satánicos.
“MILICIANOS” allí también se vieron numerosos grupos vestidos como miliciano, con gorras, chalecos, y pantalones camuflados. Existen de varias clases desde separatistas en diferentes estados hasta cazadores de inmigrantes que cruzan la frontera ilegalmente.
LOS CONFEDERADOS, también se vieron en la toma al Capitolio hombres caminando con la bandera confederada, que muchos vemos en algunas casas y marchas regularmente. Recordemos que el simbolismo de esta bandera esta asociada a los estados sureños que lucharon y perdieron la guerra. Una de las causas irreconciliables que defendían los confederados era sostener la esclavitud. Hoy en día ha sido paulatinamente quitada por ser insignias que remiten a la esclavitud y a la segregación.
PROUD BOYS. Fueron a darle apoyo a Trump. Son grupos de extrema derecha, muchos de ellos han sido detenidos por violencia. Su líder Henrry “Enrique” Tarrio. Fue arrestado y se le ordenó permanecer fuera de Washington, después de que fue acusado de destrozar una pancarta de Black Lives Mater.
ULTRADERECHA. Son miembros de agrupaciones supremacistas blancos y neonazis que también fueron vistos entre la multitud.
Todos estos grupos y otros más como “Guerra Civil”, Extremistas”, que estuvieron presentes en el insólito asalto al Capitolio, que es un ataque a nuestra democracia, condenado desde todo ángulo, fue auspiciado por el presidente del país que incitó a estos grupos a avanzar con rumbo al capitolio. Recordemos sus palabras: “Así que vamos a caminar por la Avenida Pennsylvania, y vamos a ir al Capitolio”
Es muy triste tener que ser testigos de un hecho como el que todos vimos por los medios que va en contra de nuestros principios y de la democracia de la cual nos sentimos orgullosos; podrá no ser perfecta, pero es lo mejor que tenemos y quienes sean los culpables deben de ser condenados y castigados, sean quienes sean. Sedición e insurrección no podemos permitírnosla y menos si viene del mas alto cargo del país.
El Editor
Ing. Jairo Vargas
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